domingo, 3 de julio de 2011

Santa Brígida: Mi opinión sobre La Protesta Vecinal en Monte Bravo.


He estado al tanto e informado del asunto de estos días en la Plaza Dña. Luisa. De la protesta de los vecinos y vecinas y siguiendo con preocupación el devenir de la misma. Como Concejal del Ayuntamiento de Santa Brígida es mi deber , implicarme en cumplimiento de las obligaciones de mi cargo, tal como prometí recientemente. Mi reflexión siguiente es el comienzo de esta implicación mía EN EL ASUNTO MONTE BRAVO, con ánimo constructivo, buscando el mayor beneficio vecinal y la mejor actuación municipal.


La Urbanización Monte Bravo ha puesto unas barreras que impiden el tránsito por el recinto y que era utilizado por otros vecinos como necesidad de movilidad en la zona. Los vecinos de la Plaza Dña. Luisa han expresado su disconformidad al Ayuntamiento en varias ocasiones. Los directivos de la Asociación de Vecinos la Ermita, que es la del lugar, han reiterado su protesta por escrito al Alcalde, sin obtener respuesta.

Durante esta semana pasada, el comportamiento de los directivos de la Urbanización han completado sus propósitos, cerrando las barreras e impidiendo la movilidad a los vecinos. El Ayuntamiento, el Alcalde, sigue completamente ausente. Ni siquiera toma las medidas necesarias para que quien entre en el lugar pueda salir correctamente.

Y los vecinos del Barrio, ante la inutilidad de los escritos al Alcalde, deciden plantarse y así lo hacen el miércoles pasado, 29 de Junio. Era lo que hacía falta para que el Ayuntamiento se hiciese presente. Los de la Urbanización llamaron a la policía local y llegaron al momento. De esta manera el Alcalde nos enseña que si queremos solicitar su presencia hay que presionar con acciones de estas características.

La presión de los vecinos tiene como consecuencia una denuncia de uno de los policías locales que se concretará en juicio este lunes 4 de junio. La vecina denunciada es de la Asociación. Las señoras de la urbanización fueron exquisitamente tratadas por uno de los guardias municipales. Bien podía haberles denunciado también por las amenazas que profirieron. La vecina no es una persona individual sino alguien que representa a todos los vecinos con valentía y responsabilidad.

Así debe ser considerada por todos nosotros: una mujer valiente y responsable de la que estamos orgullosos. En el juicio no es ella quien debe responder ante el juez, sino la protesta vecinal decidida y necesaria como último recurso. No debe ser ella sino la incompetencia del Gobierno Municipal para atender las necesidades de sus ciudadanos. No debe ser ella, sino la insolidaridad de unos vecinos que voluntariamente se enguetan en su propiedad privada.

Pasará el lunes. La solidaridad vecinal se convertirá en respuesta comunal concreta frente a los resultados. Después del lunes, viene el martes. El estudio de todo el problema de la Urbanización en sus relaciones con el Ayuntamiento. La actuación municipal, hasta ahora propia de incompetentes puros, debe por fin atender las demandas de los vecinos y la convivencia ciudadana que debe superar ese absurdo y vergonzante enguetamiento.

Echaremos a andar ahora mismo. Para eso me han elegido Concejal.

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